Por el promotor de lectura Adrián Guerra Pensado
Sueños y cuentos de la Niña Mala y una humilde escuelita rural
Sueños y cuentos de la Niña Mala obtuvo el premio
La Edad de Oro 1991, el premio La Rosa Blanca 1996 y un espacio en el corazón de todos los que hemos leído esta hermosísima obra que la propia Niña Mala dedica a todos los niños y a las personas mayores a quienes no se les acaban las ganas de soñar.
La obra de Raúl Ferrer y de Onelio Jorge Cardoso en aquella escuelita rural que surgió en lo que era la fonda donde almorzaban los trabajadores del villareño central Narcisa constituye una brillante clase de magisterio para todos los profesores y alumnos. Por algo el retrato de Martí fue situado por el maestro Raúl en medio del aula. La obra entrega acciones novedosas y ejemplarizantes en pro de aumentar la matrícula con el concurso de las “fuerzas telúricas” convocadas por Raúl.
Por todos estos sueños y cuentos comprendemos por qué el día en que no vino el maestro era Dorita, la que más lloraba.
Julio M. Llanes (Yaguajay, 
Sancti Spíritus, 13 de marzo de 1948) recurre a la historia como fuente para la elaboración de varias de sus mejores obras.
En Sueños y cuentos de la Niña Mala, se mezclan lo histórico, lo humorístico, en una atmósfera poética nada apartada de lo anecdótico y verídico de aquellos dos grandes de la cultura cubana.
No hay una de sus obras que no tengamos que agradecer todos los lectores a su dedicación y talento.
Promotor cultural destacado. Organizador principal de los Encuentros Nacionales de Crítica e Investigación de Literatura Infantil de Sancti Spíritus, Cuba, desde sus inicios en l989, consolidado como el evento de mayor arraigo y tradición de la Literatura Infanto-juvenil en Cuba, y que posee carácter internacional.
