Por el promotor de lectura Adrián Guerra Pensado
En este poemario que Waldo Leyva escribiera para sus hijos cuando eran pequeños y que fue guardado celosamente durante muchos años, encontramos ese mundo “diferente” que habita en los ojos de los niños. Las bellísimas ilustraciones corresponden a uno de los más notables artistas de la ilustración para la literatura infantil y juvenil con que cuenta la UNEAC, se trata del multipremiado Raúl Martínez Hernández (La Habana, 31 de mayo de 1965).
 poemario que Waldo Leyva escribiera para sus hijos cuando eran pequeños y que fue guardado celosamente durante muchos años, encontramos ese mundo “diferente” que habita en los ojos de los niños. Las bellísimas ilustraciones corresponden a uno de los más notables artistas de la ilustración para la literatura infantil y juvenil con que cuenta la UNEAC, se trata del multipremiado Raúl Martínez Hernández (La Habana, 31 de mayo de 1965).
Cuando yo sea grande
seré un inventor
y haré un aparato
que pondré en la luna
y cuando yo quiera
tocaré un botón
que destruya cohetes,
que acabe con las bombas,
y deje los tanques
sin ruedas y sin motor.
Ya no habrá más guerras
porque allí en la luna,
vigilando a la Tierra
siempre estaré yo.
Poeta,  ensayista, narrador y periodista,  sus poemas han sido traducidos al inglés, alemán, francés, ruso, portugués, italiano, rumano, húngaro, serbocroata, polaco, búlgaro, árabe y otras lenguas. Nació en Remedios, Villa Clara, el 16 de mayo de 1943. En 2010 fue ganador del X Premio Casa de América de Poesía Americana.
ensayista, narrador y periodista,  sus poemas han sido traducidos al inglés, alemán, francés, ruso, portugués, italiano, rumano, húngaro, serbocroata, polaco, búlgaro, árabe y otras lenguas. Nació en Remedios, Villa Clara, el 16 de mayo de 1943. En 2010 fue ganador del X Premio Casa de América de Poesía Americana.








